BUENOS AIRES.- Ayer se cumplieron cinco días de la ocupación por maestros de la Casa de Gobierno de Tierra del Fuego, por un duro conflicto gremial en relamo de un aumento salarial. La mandataria provincial Fabiana Ríos dijo que no negociará mientras perdure la ocupación. Ni los docentes, agrupados en Sutef (Sindicato Único de Trabajadores de la Educación Fueguina) y a cargo de la protesta, ni los funcionarios piensan bajar la guardia y el acercamiento parece cada vez más lejano. La mandataria sostuvo que desde hace cinco días está trabajando en una "oficina alternativa" porque "están bloqueadas las entradas a la Casa de Gobierno y no hay policía".
Legisladores de distintos bloques y el Colegio de Abogados povincial instaron al diálogo a las partes en conflicto. Sin embargo, el Gobierno local prepara una demanda penal contra los sindicalistas que ocuparon el edificio el jueves pasado, ya que habrían hechos destrozos y quemado expedientes, además de que durante la refriega varios policías quedaron heridos.
Mientras tanto, el ministro de Educación de la Nación, Alberto Sileoni, respaldó a la gobernadora al criticar la "violencia" de la toma de la sede gubernamental.
"La condición que puso el Gobierno para dialogar fue el desalojo de la Casa de Gobierno", dijo Ríos. Consultada acerca de si la toma obedecía a una movida gremial respondió que "no", y dijo que "luego de 10 propuestas salariales, la última fue del 33%", pero "los docentes piden 50%. ¿Piden diálogo o más dinero?", preguntó la gobernadora. Desde su entorno denuncian un pacto entre el kirchnerismo y la UCR fueguinos y el sindicato de camioneros. (Télam-DyN-Especial)